El cielo se
torna así
henchido de
nubes blancas.
El viento las
acelera,
disgrega,
revoluciona
y en la
noche, la brisa
las acaricia
y serena.
Cirros y
cúmulos
no riegan suspiros.
Nubes entre
tú y yo
que las
alborota el céfiro
y despacio,
como en un sueño,
pasan y bailan
riendo.
Nubes que
giran y avanzan
sino ¿cómo ha
de ser el futuro
si el cielo
siempre estuviera
vestido de
mes de julio?
Esta gran
nube amenaza
Colarse por
mi ventana.
¡Estoy tan
ilusionada!
¡Tengo ganas
de abrazarla
y darme un
baño de nubes
de puro
cristal labradas!
Se percibe el
sonido
de un
creciente tronar:
un
estrepitoso zumbido
de abejas
enfebrecidas
que tienen
forma lunar.
Si tengo
suerte, esta noche
las guardaré
en la encimera
donde cocino
mis versos,
crecen mis
blancos axones
y se estiran mis
neuronas.
Se ha puesto
el sol
y el ocaso
tiñe el cielo…
En las
sombras de la noche
que llegará
enseguida
por encima de
las lomas
veremos un
conjuro de luz
dorada o puro
salmón.
Nubes que el
Otoño dibuja
de mares o de
montañas.
Nubes
demasiado bajas.
Son un
ejército
de nubes en
retirada.
Alcalá de
Henares, 4 de enero de 2015
JUEGO DE LA PALABRA DADA
PALABRA: NUBES
DADORA: CANDELARIA XIFUENTES
TEXTO E IMÁGENES REALIZADOS POR FRANZISKA